¿Qué son los prefijos 600 y 800 y por qué los usan las empresas?
Si en los últimos meses has recibido llamadas desde números que comienzan con prefijos 600 y 800, probablemente hayas dudado en contestar. Esta reacción es completamente comprensible: el aumento de fraudes telefónicos ha generado una natural desconfianza hacia cualquier llamada que no provenga de un número celular tradicional. Sin embargo, en muchos casos, esas llamadas provienen de empresas serias y reguladas, como ASENCOB, que están cumpliendo con normativas impuestas por la autoridad.
En este artículo, te explicamos qué significan los prefijos 600 y 800, por qué su uso ha sido estandarizado por el gobierno, y cómo reconocer una llamada legítima, especialmente en el contexto de los servicios de cobranza.
¿Qué son los prefijos 600 y 800?
Los prefijos 600 y 800 son rangos de numeración telefónica definidos por la Subsecretaría de Telecomunicaciones (SUBTEL) en Chile. Están reservados para usos específicos:
El prefijo 600 se asigna a empresas e instituciones que necesitan realizar llamadas salientes masivas (como cobranzas, encuestas o notificaciones legales).
El prefijo 800, en cambio, suele utilizarse como línea de atención gratuita para el usuario, permitiéndole llamar sin costo.
Ambos prefijos permiten una identificación centralizada, lo que facilita la fiscalización y la trazabilidad de las comunicaciones. Es decir, cuando una empresa llama desde un número 600, es posible saber exactamente quién está detrás de esa llamada. Esto forma parte de una política pública que busca ordenar y transparentar el ecosistema de llamadas comerciales, protegiendo tanto a los consumidores como a las empresas.
¿Por qué el cambio ha generado desconfianza?
Aunque el uso de prefijos 600 y 800 tiene fundamentos normativos, la implementación ha coincidido con un aumento en las estafas telefónicas, lo que ha afectado su percepción pública. Muchas personas asocian erróneamente los números 600 con fraudes, cuando en realidad son los únicos canales autorizados para ciertas gestiones formales, como las cobranzas responsables.
Como consecuencia, la tasa de respuesta telefónica ha disminuido drásticamente. Antes de la normativa, empresas como ASENCOB lograban contactar entre el 40% y 50% de sus usuarios. Hoy, esa cifra ha caído al 20% o menos, lo que afecta directamente la eficiencia operativa y retrasa procesos que podrían resolverse en pocos minutos con una llamada.
¿Cómo reconocer una llamada legítima desde un número 600 o 800?
A pesar de la confusión, existen formas claras de identificar una llamada verdadera:
Las llamadas desde prefijos 600 y 800 son trazables: solo empresas inscritas en SUBTEL pueden usarlos.
No solicitan información bancaria o contraseñas por teléfono.
Pueden ser verificadas contactando directamente a la empresa emisora.
Son consistentes con otras formas de contacto (email, carta, mensajes certificados).
Por eso, ignorar estas llamadas puede significar perder información importante o dejar de resolver una situación pendiente de forma rápida y segura.
¿Qué está haciendo ASENCOB frente a este escenario?
En ASENCOB, entendemos las dudas que puede generar una llamada desde un número 600. Por eso, hemos implementado una serie de acciones proactivas para asegurar una experiencia de contacto más clara, confiable y cercana.
Actualización constante de nuestras bases de datos, para evitar errores de contacto o llamadas innecesarias.
Comunicación por canales alternativos, como correos electrónicos, mensajes de texto y contacto en terreno con personal debidamente identificado.
Capacitación continua a nuestro equipo, para garantizar un tono empático, respetuoso y alineado con la normativa.
Estas acciones reflejan nuestro compromiso con una cobranza ética, profesional y moderna, que pone a las personas al centro del proceso.
Prefijos regulados, empresas confiables
El uso de los prefijos 600 y 800 no debe generar temor, sino confianza. Cuando estos números son utilizados por empresas serias y responsables como ASENCOB, están cumpliendo una normativa pensada para proteger a todos: consumidores, instituciones y al ecosistema financiero.
Si recibes una llamada desde un número 600, es probable que se trate de una gestión legítima que puede resolverse de manera simple, directa y sin complicaciones.
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